Con el calor encima nuestro, necesitamos tomar mucho líquido para recuperar la pérdida de éste y el agotamiento, una buena idea junto al agua es incluir a la sandía como parte de nuestro menú, sobretodo ahora que es temporada.
Aunque los chicos son muy reacios a gustarles determinadas frutas, la sandía es una con las que tuve que batallar y ser creativa, así que un día les pregunté si querían comer helado!!! (yo lo llamo chupete ;) a lo que respondieron con un SI efusivo, entonces me puse manos a la obra.
Que necesitamos?
- 1 Sandía rojita y dulce
- Palitos
- Cuchillo y muchas ganas!!!
Corta la sandía en triángulos, yo les hice un corte hacia abajo con el cuchillo (en la parte de la cáscara verde) y luego inserta un palo (esos bajalenguas que usan los doctores) ya que la sandía suele ser pesada, ponlos en la refri unos minutos y voilá!!
Me ayudó a aplacar estas tardes de verano e incluir una fruta que antes la habían probado y se negaban a comerla, ahora siempre que vamos a hacer las compras la eligen ellos mismos.
Sacar las semillas por ellos les facilitará la ingesta.
También puedes intentar dejarlos un par de horas mas en la refrigeradora y servirlos mas congelados.
Qué tal? lo intentan? ya me cuentan :)
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